Aparentemente hay personas que no tienen mucho que hacer. O bien, disfrutan de pagar por experiencias extrañas. En China, un grupo de personas se someten a estar encerradas en una caja con tigres y leones hambrientos.
El detalle: la mini prisión en la que te meterías está decorada con pedazos de carne sangrientos para atraer a las bestias. Una experiencia única.