Por un minuto de fama una persona puede perder la cabeza. Y en la era viral, más aún. El problema viene cuando se pone en riesgo la integridad física.
El youtuber inglés Daniel Gruchy es un fiel exponente de la nueva era que todo es válido para ser famoso. Incluso saltar en una cama elástica llena de trampas de ratones para demostrar que el dolor “no existe”.
La prueba, filmada en cámara lenta, capta cada detalles del preciso momento en el que joven arriesga su integridad frente a mil trampas potencialmente peligrosas para las partes blandas del cuerpo.
El video, ACÁ.