Hay quienes dicen que el dinero no compra ni el amor ni la felicidad. Justamente en China, una joven rechazó a un rico pretendiente luego de que le obsequiara un lujoso Lamborghini.
“Cásate conmigo. Te compré tu deportivo favorito” le dice mientras le entrega un ramo de flores, a lo que ella duda algunos segundos y posteriormente rechaza la propuesta.
Sin embargo, a pesar de que le había dicho que “no”, él continuó insistiendo: “¡Tengo dinero! Puedo comprar tantos autos de estos como quieras” pero la joven se mantuvo firme: “Tienes dinero, ¿y qué?”.
Tras esa respuesta, el millonario perdió la paciencia y sacadísimo, empezó a destrozar a patadas a una instalación publicitaria que había cerca, mientras algunas personas que habían sido testigos de todo lo ocurrido, intentan calmarlo.
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