Una mañana, a los 14 años se despertó con esa voz. Barry White se crió en California, nunca terminó el colegio, se trenzaba en peleas callejeras y fue preso por robar autos. Su primer trabajo fue de productor hasta que se convenció de que tenía que cantar sus composiciones. En 1976, un artículo del New York Times le adjudicó a su música el aumento de la tasa de natalidad. Maestro del soul, romántico, murió el 4 de julio de 2003, por una insuficiencia renal. En respuesta a aquellos que decían que su propuesta orquestal no funcionaba, dijo: “Si hay creatividad de por medio, no uses la cabeza, dejate llevar por lo que sentís”.
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