Aplicaciones como KeyMe o Keys Duplicate utilizan la cámara del celular para escanear llaves físicas y guardar una copia virtual en el teléfono par poder compartir con otras personas o replicar en cerrajerías que trabajen con estas aplicaciones.
Algunas ciudades de Estados Unidos cuentan con quioscos provistos de impresoras 3D o máquinas duplicadoras de llaves en donde uno mismo puede hacer la copia.
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Ya hace unos años un profesor de ciencias de la Universidad de San Diego en California demostró que era posible duplicar llaves con sólo hacerles una foto desde la distancia, y en cualquier caso un cerrajero puede hacer un duplicado o abrir una cerradura en segundos.