En una audición que intentaba otorgarle la libertado condicional a Mark Chapman, ese infeliz que mató a tiros a John Lennon el 8 de diciembre de 1980, el asesino aprovechó para decir unas palabras:
“Perdón por causar ese tipo de dolor. Perdón por ser tan idiota y elegir la gloria equivocada. Mucha, mucha gente lo amaba. El era un gran y talentoso hombre y todavía están todos dolidos. Me llegan cartas, sé que el mío no fue un crimen como cualquier otro.”
A Chapman le negaron la libertad condicional por octava vez. En 1980 disparó 5 tiros a John Lennon mientras este y su esposa Yoko Ono se encontraban en la puerta de su departamento en Dakota, Nueva York. A sus 59 años y tras 34 en presión, seguirá tras las rejas en el penal de Attica, estado de Nueva York.