La Justicia iraní condenó a seis meses de cárcel y 91 latigazos a seis jóvenes que en mayo habían sido detenidos por filmar su propio videoclip de “Happy” de Pharrell Williams. También fue condenado el acusado de dirigir la grabación.
La semana pasada fueron declarados culpables por “Participar en la producción de un vídeo vulgar” y “Mantener relaciones ilícitas”. En Irán, “Relaciones ilícitas” significa cualquier contacto entre personas de distinto sexo sin relación familiar directa.
Por suerte y gracias a los abogados defensores y la presión internacional, la aplicación de las penas fue suspendida y los adolescentes no serán privados de la libertad ni sufrirán los 91 latigazos.