A pocos días para terminar el año, Capital Cities regresó a nuestro país después de su exitoso paso por el Lollapalooza y armó una verdadera fiesta en el Luna Park.
Pasadas las 21:30, Ryan Merchant y Sebu Simonian subieron al escenario y comenzaron con “Tell me how to live”, el tema con el que acostumbran abrir sus shows y que se desprende de su álbum debut, “In a tidal wave of mystery”.
“Buenas noches, Buenos Aires”, fue el saludo de los hombres vestidos en tonos oscuros. Inmediatamente llegó “Chartreuse”, que contó con un pedido muy especial. El público debía hacer una pequeña coreografía en el estribillo. ¿El resultado? Primer gran momento en el palacio de los deportes.
Ya a esta altura, uno de los puntos fuertes del show se hizo notar. ¿De quién hablamos? Spencer Ludwig, el trompetista. La rompió. La dejó chiquita. Pónganle el calificativo que quieran, pero no hubo tema en que no haga estallar a la gente.
Claro que una de las especialidades de Capital Cities es poner a bailar a su público. Para eso, Ryan y Sebu eligieron “Center stage”. Aquí, el pedido fue más simple: vayan de un lado para el otro. Y una vez más, los presentes respondieron.
Minutos después llegó el tiempo de los covers. “Remember the time”, de Michael Jackson, provocó la ovación general y dejó el clima bien caldeado para “Kangaroo court”, el primer hit de la noche.
Las luces (uno de los puntos flojos del show, sin dudas) comenzaron a moverse al ritmo del tema y el público agradeció cantando, saltando y gritando.
Acá hacemos otro paréntesis. Si hablamos de público hay que remarcar que sorprendió la cantidad de familias que asistieron: adolescentes, madres, padres y chicos chiquitos, algo que demuestra que la música de Capital Cities es apta para todo público.
Hubo tiempo para recordar a los héroes de la música disco con “Staying alive”, el clásico inoxidable de los Bee Gees que una vez más contó con el inestimable carisma del trompetista que, dicen, toca hace menos de cuatro años.
Promediando la noche, Capital Cities siguió su camino con “Love away”, “Patience gets us nowhere fast” y “One minute more”, todos temas de su disco debut.
Para ir cerrando faltaba ese tema, el que no podían dejar de hacer. Y lo hicieron al máximo, sin guardarse nada. Estamos hablando de (una versión larguísima de) “Safe and sound”, que contó con momentos exclusivos para que los cinco músicos sobre el escenario se lucieran.
Terminado el hit hubo un breve descanso y la banda volvió para cerrar con “Nothing compares 2 U” de Sinéad O’Connor, “Celebrate” de Madonna y un remix algo turbulento de “Safe and sound” que desató la locura total.
Y así se fueron. Con ritmo, baile y carisma. Algo que en la noche porteña fue posible gracias al (corto) show de Capital Cities.
Por Gonzalo Lettieri
Fotos: José Luis García
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