¿Necesitás dibujar un círculo perfecto? Olvidate del compás o, mejor dicho, usá tu mano como un compás, así:
1. Apoyá el costado de tu muñeca sobre el papel haciendo presión.
2. Apoyá el lápiz firme sobre el papel y con la otra mano girá el papel.
3. Resultado: Un círculo perfecto