Anoche, en la edición número 49 del Super Bowl, le tocó a Katy Perry ser la protagonista del mundialmente conocido entretiempo. La cantante, que entró sobre un león mecánico gigante, interpretó algunos de sus grandes éxitos y estuvo acompañada de Lenny Kravitz y la rapera Missy Elliot.
Durante unos quince minutos Perry formó parte de un show impecable con un deslumbrante despliegue de luces, bailarines y una escenografía a la altura de una apertura de mundial de fútbol.
Este es el show, mirá