No hay duda que la amistad es un regalo increíble, ya sea entre personas o animales.
Esta es la historia de Duke, un rottweiler que permaneció ocho años alejado de su dueño, Josh Edwards.
Por suerte decidieron filmar el momento en el que vuelven a mirarse a los ojos: Al principio Duke está distraído, hasta que huele las manos de Josh y nos regala un momento increíble.