Nuevamente un caso en el que la realidad supera, por mucho, a la ficción.
En la localidad de Karlsruhe, Alemania, el artista australiano Erwin Wurm fue multado por dejar “mal estacionada” su obra.
Si bien la suma no es tan grande (30 euros) las autoridades salieron a decir que el vehículo tenía matrícula y que correspondía la multa. Evidentemente no vieron la forma en la que el coche estaba doblado y que formaba parte de una exposición de arte presente en la ciudad.