Un surfista vivió una situación extrema en Manly Beach, Australia.
Mientras se disponía a disfrutar de las grandes olas, el deportista detectó una gran mancha blanca que se acercaba cada vez más.
Desesperado, comenzó a nadar sin rumbo por varios segundos para ponerse a salvo. Minutos después, tomó su cámara, la sumergió y filmó lo que muchos creen que era un tiburón blanco.
Es preciso remarcar que la última vez que un ejemplar como este atacó a una persona en esa zona fue en 1936.
¿Lo ven o no?: