Esta es la historia de Kobe, una hermosa perra pitbull abandonada pocos días después de nacer y que fue rescatada por trabajadores de un refugio de animales llamado Baltimore Bully Crew.
Mientras curaron sus heridas, la vida de Kobe mejoró considerablemente. Sin embargo, ella vino al mundo para dar y recibir amor. Fue entonces cuando el universo conspiró a favor de sus intereses y puso ensu camino a Sean y Jade, sus “papás” adoptivos.
Desde ese momento, su hocico exhibió una contagiosa sonrisa que no se desdibuja por nada. “Pone esa cara de risa todo el tiempo”, admitió Sean.
¿No es hermosa?.