El verano se fue, el frío llegó y el cuerpo se oculta detrás de numerosas prendas abrigadas. Esas que, inconsicientemente, funcionan como barrera estética frente a las calorías extra que consumimos.
Ante esta situación sólo quedan dos caminos: mantenerse activo o que pase lo que tenga que pasar. Si vos odiás el gimnasio pero querés mantener un peso acorde a tus expectativas, tranquilo. Tenemos algunos tips para llegar sano y salvo a la primavera.
Existen algunas tareas hogareñas que pueden ayudarnos. Enterate ACÁ.