La Unión Ciclista Internacional suspendió a una competidora belga por “fraude tecnológico”. Femke Van Den Driessche fue acusada de haber escondido un motor mecánico en una de las ruedas de su bicicleta durante una carrera.
“Se trataba de un motor Vivax, escondido en la rueda y controlado por ‘bluetooth’ desde el manillar“, detalló la organización.
Tras la sanción, la deportista se defendió y dijo que “la bicicleta era de un amigo”. Explicó que terminó en sus manos después de el “error de un mecánico”. ¿QUIIII?