Los hipopótamos del zoológico que el narcotraficante Pablo Escobar supo tener en su propiedad quedaron en libertad tras su muerte y se reprodujeron hasta convertirse en una peligrosa manada que preocupa a los colombianos.
Escobar instaló en su mansión un zoológico con varias especies africanas, como jirafas, elefantes e hipopótamos, y ahora las autoridades no saben qué hacer con ellos, sobre todo con los hipopótamos. Los biólogos creen que lo mejor es esterilizar a los machos para frenar la reproducción.
La Corporación Autónoma Regional de las Cuencas de los Ríos Negro y Nare (Cornare) construyó una cerca para rodear las 30 hectáreas donde suele retozar la manada, para ponerle freno a esta situación y evitar eventuales ataques. El seto se construye alternando tramos de arbustos espinosos, con barreras de piedras filosas y un cerco eléctrico, junto a la siembra de pastos y plantas de forraje para evitar que los animales salgan de su hábitat en busca de alimento.