La cantante Rihanna aprovechó su reciente concierto en la ciudad francesa de Lille para avisar a los presentes de que no quería verlos distraídos en ningún momento por culpa de las nuevas tecnologías, exigiéndoles que se abstuvieran de usar el móvil para escribir a sus parejas o incluso para utilizar la aplicación que ya se ha convertido en todo un fenómeno de descargas: el Pokémon Go.
“No quiero ver a nadie con el móvil en la mano, mandando mensajes a sus novios o novias. Y que no se os ocurra atrapar pokémon mientras estoy sobre el escenario“, les dirigió la barbadense en mitad de su actuación.
Aunque la antipatía que puede sentir la cantante pop por el último éxito de Nintendo, la molestia parece estar más relacionada con la necesidad de asegurar el buen desarrollo de su espectáculo musical, otros famosos como el director de cine Oliver Stone no han dudado en acusar directamente a la compañía nipona de contribuir con su juego a la situación de “sometimiento” que la población mundial sufre por parte de las grandes corporaciones.
