Ayer en el Subte B la motorman tuvo un “pequeño” descuido y confesó su más profundo secreto que hizo estallar de la risa a los pasajeros.
En el trayecto que une la estación Alem con Los Incas, la motorman sin querer se olvido que tenía el micrófono prendido y mientras hablaba por teléfono confesó ¡que le era infiel a su marido! por supuesto los cientos de pasajeros que viajaban en ese momento lo escucharon y se murieron de risa.
Mirá lo que pasó: