Un oso panda del zoológico de Sichuan, China, sorprendió a los turistas después de comenzar una maratónica sesión de abdominales a plena luz del día.
Preocupado por su salud, el mamífero recostó su cuerpo en una cama de bambú y comenzó a subir y bajar el torso ante la incrédula mirada de las personas.