Sabemos que Nickelback es una de las bandas más odiadas y repudiadas del mundo. Pero a pesar de eso, son uno de los grupos más vendedores de la historia. Esta dicotomía lleva a que muchos tomen de burla a los canadienses y los utilicen como “chiste fácil”.
Esto es lo que pasó en la Isla Principe Edward de Canadá, donde la policía adoptó una medida un poco fuerte para aquellos que se pasen de copas y manejen: les van a hacer escuchar el disco Silver Side Up a todo volumen en la patrulla para que entiendan que lo que hicieron estuvo mal. Muy mal…
La pena la dieron a conocer a través de su pagina de Facebook donde la policía anunció que además de la multa, de la quita de la licencia de conducir y de los cargos criminales se les hará un bonus: escuchar Nickelback de camino a la estación.