Esta es la historia de Andrew Taylor, un australiano que decidió hacerle frente a su obesidad con una dieta curiosa y peligrosa, aunque efectiva para él.
Su marca máxima fue de 150 kilogramos, número que lo llevó a adoptar un plan de alimentación basado únicamente en comer papas.
Esta dieta, que comenzó el pasado 1 de enero de 2016, lo llevó a perder más de 50 kilos. Según Andrew, la papa tiene todo lo que necesita para una correcta alimentación: proteínas, carbohidratos, hierro, fibra y vitamina C.
Mirá el timelapse ACÁ.