La modelo Sarah Shoffner puso en marcha un operativo estético que tuvo como objetivo lograr un cosplay “perfecto” de Maron, el primer amor de Krillin.
El personaje no tuvo mucho recorrido en la historia de Akira Toriyama. De hecho, el mejor amigo de Gokú, tiempo después, formalizó con Número 18 con quien tuvo una hija. Aún así, Maron se las ingenió para quedar en el inconsciente colectivo de los fanáticos de “Dragon Ball”.
El resultado de la imitación fue único. Conocelo ACÁ.