Contra reloj. Los 12 niños que están atrapados en una cueva en el norte de Tailandia están siendo entrenados para aprender a nadar y bucear debido al temporal que está previsto para el viernes en la zona y que podría complicar más el rescate.
Según informó Gizmodo, si bien el plan principal era drenar el agua de la cueva antes de que llegaran las tormentas, el poco tiempo hizo cambiar el rumbo del rescate.
Mientras se preparan, los niños están acompañados por una enfermera y cuatro soldados para llevar un seguimiento de su salud. “Los estamos cuidando como nuestros propios hijos”, dijo Narongsak Osatanakorn, el gobernador de la provincia de Chiang Rai.
Según explicó Greg McCracken, experto en buceo con el Ocean Quest Dive Center, existe la posibilidad de que puedan hacerlo. “Entiendo que los niños pequeños no han aprendido a nadar antes, eso podría significar que serán un poco más tímidos sobre ciertas cosas que deberán hacer, pero todo es posible”, explicó.
En cuanto a la posibilidad de que deban sumergirse en las profundidades McCracken dijo: “En cualquier caso, creo que los niños podrían llegar a zambullirse en las profundidades. Los buceadores de rescate realmente tomarían el control de todo, por lo que siempre y cuando tuvieran un suministro de aire, los buzos de rescate incluso pueden remolcarlos, literalmente”.