El pescador Claudio Armúa, halló los restos semienterrados, explicó el paleontólogo Luciano Rey, del equipo técnico del Patrimonio Arqueológico-Paleontológico del Ministerio de Cultura de Santa Fe: “Le llamó la atención un gran molar que asomaba casi en el pelo del agua, tras lo cual, la pieza fue extraída sin ninguna técnica adecuada y al escarbar a su alrededor, se rompió una parte del maxilar”.
“Lo que se halló fue una porción de maxilar del cráneo de un mastodonte, con cuatro molares muy bien conservados, y en estos días, vamos a ir al sitio del hallazgo, porque sospechamos que hay más restos de este animal que habitó el pleistoceno pampeano”, explicó.
El maxilar de mastodonte, de unos 30 kilos, ahora fue trasladado al Museo Tito Zuddas de Andino. Los dientes de la dentadura del mastodonte tienen entre 5 y 10 centímetros cada uno y son de un tamaño similar a un puño humano.
El paleontólogo santafesino explicó que el mastodonte “era un animal similar a un elefante, que llegaba a tener unos 3 metros de altura y 6 toneladas de peso”, y a diferencia de los elefantes y mamuts, el mastodonte “poseía colmillos casi rectos”.