Post Malone pasó la víspera de Navidad en un bar local de Houston y dejó una propina increíblemente generosa a una moza. El músico se encontraba en la ciudad para participar en el espectáculo de medio tiempo de la NFL junto a Beyoncé.
Renee Brown, una camarera de 36 años y madre de una niña de 9, contó en una entrevista: “Les dije a todos mis clientes habituales que no fueran raros y que no lo molestaran porque es un bar de barrio, y estoy seguro de que eligió un lugar así para sentirse normal”, explicó. “Le levantó el ánimo a todo el bar. Fue increíble ver a todos tan felices y ver lo amable que era con todas las personas que pasan sus días conmigo habitualmente. Todas las personas con las que estaba también eran muy amables y acogedoras, pasamos una gran noche escuchando las canciones que sonaban en la máquina de discos”.
Al enterarse de que su cuenta ya había sido pagada por su grupo, Malone le pidió a Brown que le cobrara cualquier monto para poder dejarle una propina. Ella le cobró un dólar y el cantante sumó 20.000.
La moza compartió su experiencia en Instagram: “Cuando fui a trabajar la víspera de Navidad, estaba tan triste que tuve que dejar a mi niña para ir a trabajar. No sabía que Dios me enviaría un milagro de Navidad. Esta es, sin lugar a dudas, la celebridad más humilde y agradable que he tenido el placer de conocer. Cambió mi vida la víspera de Navidad y le estaré eternamente agradecida. Muchas gracias, Austin”.
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