Investigadores del Instituto de Investigación de la felicidad en Copenhague decidieron hacer un experimento con Facebook respecto a la felicidad.
Para esto se llevaron a un grupo de 1.095 usuarios de Facebook y los dividieron en dos grupos. Al primer grupo se le permitió seguir usando la red social todos los días, mientras que el toro fue obligado a abandonarlo por todo el experimento.
Los resultados fueron contundentes: Después de 7 días, el 88% del grupo que dejó Facebook dijo que se sentían más felices en relación al 81% que no dejo de usar el sitio. También se sentían menos enojados, menos solos, menos deprimidos y más entusiastas.
El estudio también revela que la gente en Facebook es un 39% más propensa a sentirse menos feliz que sus amigos.
El dato más interesante del estudio es el siguiente: Las personas, en lugar de centrarse en lo que realmente tienen o necesitan, gracias a Facebook ponen el foco en lo que otros tienen: 5 de cada 10 personas envidia las experiencias que otros publican en Facebook; 1 de 3 envidia el nivel de felicidad que otros reflejan en la red social y 4 de 10 envidia el aparente éxito de otros en Facebook.
Los investigadores señalan que hay una tendencia social muy marcada a pensar que la vida real pasa en el Facebook, cuando en realidad es todo lo contrario.