Está claro que, en verano, la ingesta de cerveza alcanza picos históricos entre familiares y amigos. No solo refresca; también sirve como excusa para reunirse y charlar sobre diferentes cuestiones.
Pero detrás del ritual, la compañía sueca Snasks encontró una vuelta de rosca para el negocio de la rubia pasión: Shower beer, la cerveza diseñada para disfrutarla bajo la ducha.
Se trata de una cerveza pequeña, que puede tomarse en tres o cuatro tragos. Si bien el tamaño es escaso, la graduación alcohólica de la bebida es potente.
Detalles, ACÁ.