Hacer un gol es sinónimo de euforia en las tribunas. Pero si el artífice de embocarla es tu propio arquero, mucho mejor.
¿De penal o de tiro libre? Eso es para principiantes. Mark Weir, del FC Wichita de Estados Unidos, pateó la globa desde su propia área y la clavó en el arco del equipo rival.
Es preciso remarcar que esta insólita acción se dio entre dos clubes que militan en la cuarta categoría. Aún así, vale…
Miralo ACÁ.