Si de inventos geniales se trata, el que hizo Casey Neistat tiene todo lo que se necesita para reclamar el primer puesto.
A su costoso skate, valuado en 1600 dólares, Casey creyó que le faltaba movilidad propia. Fue así como juntó algunos tornillos, alambres, baterías y un taladro eléctrico.
¿El resultado? Estás por verlo ACÁ.