Ajmal Zemmar, neurocirujano de esa Universidad afirmó que “mediante la generación de oscilaciones implicadas en la recuperación de la memoria, el cerebro podría reproducir un último recuerdo de eventos importantes de la vida apenas antes de morir“, publicó la agencia Ansa.
El estudio se realizó en forma accidental en un paciente de 87 años con tratamiento por epilepsia y conectado a un electroencefalograma, cuando imprevistamente tuvo un infarto y murió.
En los 30 segundos finales del latido cardíaco del paciente, fue individualizado un aumento de ondas cerebrales muy específicas. Son conocidas como oscilaciones gama, ligadas a cosas como la recuperación de la memoria, la meditación y el sueño.
Esto podría significar (aunque serían necesarios muchos más estudios) “que podríamos ver una suerte de bobina cinematográfica de nuestros mejores recuerdos mientras morimos“, dice el estudio