En declaraciones a la revista Rolling Stone, declaró: “Quiero hacer poco a poco este álbum que es, entre comillas, ‘perfecto’ para el resto de mi vida, añadiendo canciones aquí y allá. Y tener en mi testamento que, después de morir, salga a la luz”.
La megaestrella del pop, de 32 años, hizo esta confesión al hablar por primera vez sobre sus pensamientos suicidas tras la muerte de sus mejores amigos Jamal Edwards y Shane Warne con pocas semanas de diferencia.
El cantante quedó devastado por la muerte en febrero de 2022 del productor musical Jamal -hijo de la estrella de “Loose Women” Brenda Edwards-, que falleció tras un paro cardiaco provocado por la cocaína y el alcohol, y ahora dijo que la muerte un mes después de su amigo jugador de críquet Shane, de 52 años, le hizo sentir que se estaba “ahogando” en su lucha de toda la vida contra la depresión.