Pasó la segunda edición del Beldent Random Music Fest con la presentación de Kate Nash, Illya Kuryaki and the Valderramas, Sky Blu y Miranda.
Es cada vez más común la compra de singles por Internet y cada vez más difícil encontrar alguien que se abandone a la escucha de un disco entero sin caer en la tentación de alternar con canciones de otras bandas cargadas en el mismo reproductor. Un poco de esta, un poco de aquella… finalmente el random es la mejor opción para una cultura mayormente joven que disfruta de la cantidad y diversidad de opciones que ofrece el mercado. Para todos ellos existe el Beldent Random Music Fest, un formato original y novedoso que ayer tuvo su segunda edición en el predio de Vicente López frente al río: cuatro escenarios, cuatro bandas y un gigantesco faro que en forma aleatoria iluminaba cada stage indicado qué artista saldría a escena.
Kate Nash, Illya Kuryaki and the Valderramas, Sky Blu y Miranda fueron las bandas principales que aceptaron el desafío. Sí, desafío. Porque en cada salida tenían que lograr conectarse con su público rápidamente. Una especie de conquista que requería salir a tocar con la mejor gala: un hit tras otro, con poco lugar para temas inéditos o desconocidos; y puestas en escena importantes, que incluyeron un cambio de vestuario en cada salida.
Minutos pasadas las ocho de la noche –hora en que arrancó la transmisión exclusiva de Metro de la mano de Javier Zuker y Luciano Banchero– las luces del predio se apagaron y el faro comenzó a girar. Los Illya Kuryaki and the Valderramas fueron los elegidos para comenzar oficialmente el festival. Dante Spinetta y Emmanuel Horvilleur se las ingeniaron para condensar en sus tres presentaciones –cada banda salió tres veces a escena con tres o cuatro canciones en cada oportunidad- temas de su último disco como Ula Ula, Funky Futurista y Águila Amarilla; con canciones consagradas como Jennifer del Estero, Coolo, Chaco, Remisero y Abarajame.
Por su parte Kate Nash no dejó de lado la razón fundamental de su tercera visita al país: presentar su tercer disco, Girl Talk. Si bien armó un show con los mejores hits de su carrera como Do-Wah-Doo, Foundations, y Dickhead; dejó espacio para mostrar definitivamente un costado más oscuro con material nuevo. Sister, Fri-End? y Oh My God! fueron las elegidas. La ex pelirroja no solo se valió de sus letras para impactar con su show, sino que también se mostró muy cercana a sus seguidores y en varias oportunidades se bajó del escenario para abrazar y saludar a todos aquellos que se colgaban de la valla. Para el cierre eligió Underestimate The Girl, tema editado en esta nueva etapa, pero que no está incluido en el último LP.
Miranda y Sky Blu fueron los encargados de dar los shows más excéntricos. Mucho baile, brillos, puestas en escenas impactantes y vestuarios llamativos inundaron las dos presentaciones. El músico estadounidense fue el encargado de cerrar la noche y lo hizo desbordado de energía y con una suelta de globos entre el público, que no dejó de bailar y festejar cada una de sus frases.
De esta manera se fue la segunda edición de este festival que ya se instaló como una nueva alternativa al formato clásico de recital.
Texto: Silvana Canton
Foto: Cecilia Salas
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